Cuando toca hablar de impuestos, la mayoría de nosotros solemos poner cara de confusión. Y sí, el nuevo Régimen Simplificado de Confianza (RESICO) ha generado muchas dudas, sobre todo sobre si sigue vigente el pago del Impuesto Sobre la Renta (ISR) o si existe alguna excepción.
¿Qué es RESICO?
El RESICO es un régimen fiscal nuevo en México, pensado para facilitar el cumplimiento de obligaciones fiscales a personas físicas y morales que normalmente tienen ingresos bajos o medios. Su introducción tiene un solo objetivo: hacer que los trámites sean menos complicados y, al mismo tiempo, que más personas se sumen a la formalidad.
Este régimen busca animar a emprendedores, trabajadores independientes y pequeñas empresas a pagar impuestos, brindándoles la condición de hacerlo bajo reglas claras y simplificadas, así como con tarifas accesibles.
¿Qué es el ISR?
El Impuesto Sobre la Renta (ISR) es uno de los impuestos más importantes de nuestro país. Se trata, en esencia, de un tributo que pagas sobre tus ingresos, ya seas persona física o moral.
El ISR existe porque, como todos sabemos, se necesita recaudar recursos para que el Estado pueda cumplir con sus funciones: salud, educación, seguridad y obras públicas, entre otras. Todos quienes percibimos ingresos, en alguna medida, estamos sujetos al pago de este impuesto.
El ISR grava lo que ganas en salarios, honorarios, arrendamiento, venta de productos, prestaciones de servicios y, en general, cualquier tipo de ingreso sujeto a la ley.
Conceptos clave del ISR
La forma más sencilla de entender el ISR es con tres ideas clave:
- Sujeto gravado: Todas las personas físicas (individuos) y morales (empresas) que generen ingresos en México.
- Base gravable: Es la cantidad sobre la cual se calcula el impuesto y se obtiene restando a los ingresos las deducciones autorizadas (como gastos estrictamente indispensables, inversiones y algunos otros conceptos).
- Pago: El ISR se paga a través de declaraciones periódicas (mensuales, bimestrales o anuales), y en ciertos casos, tu cliente puede retenerlo directamente de tus facturas.
¿Se paga ISR en RESICO?
Vamos directo al grano: sí, en RESICO sí se paga ISR. No es un régimen exento de este impuesto. Sin embargo, lo interesante viene en la forma en que se calcula, ya que las reglas son mucho más sencillas y las tarifas (porcentajes aplicables) suelen ser más bajas que en otros regímenes.
El objetivo del RESICO, recordemos, es justo facilitar el cumplimiento haciendo el cálculo más accesible, rápido y previsible. Así que no desaparece tu obligación de contribuir, pero sí la hace menos pesada.
¿Cómo funciona el pago del ISR en RESICO?
En RESICO, el pago del ISR se realiza bajo esquemas muy simplificados comparados con los otros regímenes fiscales. ¿Qué significa esto en concreto?
- Tarifas o porcentajes simplificados: En lugar de una tabla extensa con varios porcentajes, en RESICO tienes tarifas fijas y bajas. Por ejemplo, para personas físicas, las tasas van del 1% al 2.5% sobre el total de tus ingresos cobrados, sin restar muchos tipos de deducciones.
- Pago bimestral o mensual: Si eres persona física en RESICO, la declaración y pago es normalmente bimestral. Si eres persona moral, la presentación sigue siendo mensual.
- Deducciones y créditos acotados: A diferencia de otros regímenes donde podrías deducir una larga lista de gastos, en RESICO no tienes derecho a deducciones amplias (aplica sólo en personas morales algunas deducciones, pero están limitadas).
Diferencia entre RESICO y otros regímenes
La principal diferencia es la simplicidad. En RESICO:
- Tienes menos trámites: la autoridad ya calcula el impuesto prácticamente por ti, con base en tu facturación.
- Manejas tarifas reducidas en ciertos rangos de ingresos, lo que resulta muy atractivo para pequeños contribuyentes.
- No puedes deducir gastos complejos ni amortizar pérdidas como lo harías en el Régimen General, lo que significa que el monto calculado será más directo sobre tus ingresos brutos.
Esto ayuda a muchos porque ahorran en tiempo y en costo contable, aunque para algunos podría implicar una carga fiscal mayor si sus deducciones en otro régimen eran considerables. Si quieres profundizar en las posibles desventajas de RESICO, revisa esa sección para tomar una decisión informada.
Ejemplo rápido (muy simple)
Imagina a Clara, una diseñadora gráfica freelance que obtuvo $100,000 de ingresos cobrados en dos meses. Ella tributa en RESICO como persona física.
- La tasa de ISR para su nivel de ingresos es del 1.25%.
- El cálculo es sencillo: $100,000 x 1.25% = $1,250.
Esto significa que al declarar su ingreso ante el SAT, su ISR a pagar en ese bimestre es solo de $1,250. No hay pérdida en cálculos: el porcentaje aplica directo al ingreso cobrado, sin una larga lista de gastos a restar ni tablas complicadas.
Ventajas y consideraciones al pagar ISR en RESICO
El RESICO llegó como una bocanada de aire fresco para muchos, pero hay que tomar en cuenta tanto las ventajas como las consideraciones antes de decidir si es la mejor opción en tu caso.
Ventajas:
- Declaraciones rápidas y simples, con poco papeleo.
- Tasas de ISR bajas en comparación con otros regímenes para quienes tienen ingresos bajos o medios.
- El SAT realiza buena parte de los cálculos, reduciendo errores y facilitando el proceso.
- Manejo integrado con el tratamiento del IVA en RESICO, para llevar un control fiscal más sencillo.
Consideraciones:
- Hay límites de ingresos para poder permanecer en RESICO. Si los superas, tendrás que cambiar de régimen.
- Las deducciones permitidas son mínimas, así que si tienes gastos altos, podrías estar mejor en otro régimen.
- Hay operaciones que excluyen a ciertos contribuyentes (como socios, accionistas o quienes tengan ingresos por bienes de terceros).
- Es importante revisar tu situación personal con un contador para no llevarte sorpresas.
Pasos prácticos si estás en RESICO
Si ya formas parte de RESICO o quieres hacer el cambio, estos pasos prácticos te ayudarán a mantener tus obligaciones en orden:
- Verifica que cumples con los requisitos de RESICO: Checa tus topes de ingresos y asegúrate de cumplir con los demás criterios y requisitos para RESICO.
- Lleva control de tus ingresos y comprobantes: Asegúrate de facturar correctamente y conservar todos los documentos para evitar problemas ante el SAT.
- Declara y paga ISR conforme a las fechas del SAT: Ya sea bimestral o mensual, no te retrases para evitar multas y recargos.
- Consulta con tu contador si conviene seguir en RESICO: Cada caso es diferente y puede convenir un análisis anual para saber si te sigue beneficiando este esquema.









